tratamiento de embolia pulmonar
El tratamiento de la fase aguda de esta enfermedad consiste en el empleo de anticoagulantes , primero por vía parenteral (heparina no fraccionada, heparina de bajo peso molecular o fondaparinux), y después por vía oral, aunque en la actualidad existen nuevos anticoagulantes orales que permiten su administración oral desde el inicio. “En una minoría de pacientes, habitualmente aquellos que se presentan con una mayor gravedad o que tienen contraindicación para la anticoagulación, pueden requerirse otros tratamientos farmacológicos (trombolíticos) o medidas mecánicas (filtros de vena cava) para acelerar la eliminación del coágulo o prevenir su embolización a los pulmones”, destaca De Miguel.